domingo, 2 de septiembre de 2007

Sophie y su Westfalia

Sophie vende una Westfalia en Craigslist.com. Ella vive en San Jose y dice que esta en "excelent conditions" (la furgoneta, se entiende...) y nosotros como no nos lo creemos hemos decidido ir a averiguarlo.
Despues de cruzar unos emails con nuestra nueva amiga y de hacer un par de averiguaciones basicas (tipo barrio sesamo) sobre San Jose (lejos/cerca, arriba/abajo), nuestra intrepida pareja se pone en rumbo, con la expectacion del no saber que encontrarse, nerviosismo por creerse dos pichones a punto de comprar algo incomprensible para ellos. Motores, cilindros, valvulas y juntas de culatas suenan a cosas muy tecnicas. O nosotros somos muy paquetes.
Elucubramos y nos hacemos historias de Sophie (en esto si somos buenos).
Seguro que es mecanica, musculosa, fuerte, con tatuajes, nos recibira con un mono azul y un soplete, y fijo que nos hara el lio.
Que va, se acaba de divorciar de su marido y en la reparticion de bienes le toco la Westfalia y la quiere vender (le vamos hacer el lio nosotros, fijo),
Pues yo creo que es una profesora de Frances en San Jose que se parece a Mary Pierce y que esta aburrida de su vida monotona se muda de costa y vende la furgo.
A mi me da que es una señora de 60 años, se acaba de quedar viuda y su tesoro durante mucho años que compartio con su marido era esa Westfalia, sola, lo unico que le queda es venderla...
Asi todo el viaje hasta San Jose, pensando, haciendonos pajas mentales, maquinandonos con como seria la furgoneta, Sophie, San Jose y la historia que ibamos a contar nosotros, la forma en la que ibamos a parecer unos profesionales de la mecanica, unos estudiantes sin dinero, como representabamos el espiritu de la verdadera Westfalia...ya veras, nos van hacer el lio fijo!!
Tras dos horas de autobuses y trenes llegamos a San Jose con una direccion: Hamilton Park Drive 4150. La ciudad es limpia, calurosa, acogedora, verde, luminosa, amplia y da muy buen rollo.
Buscando de autobus en autobuses a alguien que nos mostrase la forma de llegar percibimos que entre el volante y el asiento del Bus 82 una gorda negra grita sin parar y hace aspavientos intentando hacerse espacio en la minuscula cabina donde da la sensacion que lleva poltrada desde hace 15 años, nunca ha salido, vive y duerme alli. Ella es encantadora, nos indica el camino y nos lleva gratis hasta el siguente bus.
Despues de una larga odisea, llegamos a nuestro destino, no sin descubrir una pequeña particularidad sobre los habitantes de esta ciudad soleada de California. La gente esta aplatanada, tanto, que no es capaz de pensar, solo el mero hecho de intentar pensar les hace sudar. Y no solo eso, sino que, el que tiene una gasolinera en la que lleva trabajando los ultimos 25 años nunca se ha parado a pensar el nombre de la calle de atras, o el vecino que lleva 15 viviendo en su casa tampoco sabe (ni le importa) como se llama la calle paralela y asi sucesivamente. Nos han puesto nerviosos, aunque al final hayamos llegado (45 minutos tarde) a Hamilton Park Drive y efectivamente sea la calle de atras del de la gasolinera y la paralela del otro...
Al entrar en la calle ya vemos la furgo, blanca, limpia, preciosa, con sus letras en negro en lo alto del techo que pone WESTFALIA. A medida que nos vamos acercando nuestra sonrisa se hace mas y mas grande, no hablamos, solo nos miramos y comprendemos que esta puede ser la nuestra. La furgo esta perfecta. Nos gusta y es la que queremos. Nos hacemos con Sophie, la caemos muy bien y esta encantada con nuestra presencia. El precio es demasiado alto, regateamos y al final quedamos en que nos tomara en cuenta a pesar de nuestra oferta pauperrima y que antes de venderla a otros seguro que nos llamara para informarnos, por si queremos subir la oferta a la de su mejor postor. "You've got the real Westfalia spirit", nos dice, nos miramos y mentalmente sonreimos sabiendo que la hemos engañado bien. Somos buenos.
La vuelta a San Francisco fue muy larga, dos autobuses en San Jose, 1 metro y un tren para llegar a Sanfran a las 12.30 de la noche, muy cansados y sin dinero. Desde la estacion dos autobuses (que nos invitan los conductores) nos llevan hasta 'casa Maria'. Alli, por fin el descanso y las explicaciones de nuestro viaje a Maria, Ben y Hannah, que nos estan tratando mucho mejor de lo que deberian y de lo que pensamos en algun momento. Gracias a ellos San Francisco tiene otro color. Lo agradecemos profundamente. Ya nos podemos meter a dormir tranquilamente, sabiendo que las cosas estan bien hechas y que tal vez....alguna vez...Sophie y su Westfalia puedan llegar a ser...parte de nuestra aventura.
Os queremos

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo sólo os digo que ya me están preparando las pegatinas...mi coleguilla artista e inminentemente famoso

"Naughty Hottie", pues?

aaaaaaaa

Anónimo dijo...

Jajajajajaja,

esta historía ya podría ser digna de relato. Sois buenos!

Mantenernos al tanto, que hay quien os seguimos incesantemente.

aaaaaaaaaa

Chapis dijo...

ke buen comienzo.....impaciente por saber si westfalia se convierte en vuestra "poderosa", la ke os llevara hasta donde el destino decida
un abrazo lleno de love+peace
xxx

Natalia dijo...

No puedo explicaros, desde mis 41 años y mis madriles, la envidia que me dais...

Txete...me parece mentira verte allí...tanto como lo habías soñado...

Te kiero y te echo de menos...

Un mordisco en el papo.